Por Andrés Belluzzi
League of Legends es un videojuego que ha logrado consagrarse y establecerse en la industria a lo largo del tiempo, tarea nada sencilla para el mundo de los juegos free to play, onlines y competitivos. Siendo el videojuego más stremeado de manera constante en los últimos años y cuna de varios stremears hoy ya consagrados(Ibai o Coscu por citar algunos), el LoL ha sabido expandirse e intentar moverse por otros lugares que lo alejen de ese mote de “El juego con la comunidad más tóxica”.
A razón de contenido constante entre skins para personajes, cambios de mapa, modos de juego, entre otras variantes y con un galardonado competitivo a nivel mundial coronado por el rey demonio, Faker, que hoy en día ya se considera una leyenda dentro del mundo gamer profesional, League Of Legends ha sabido convertirse en más que un videojuego, sino para muchos, un estilo de vida.
Lo cierto es que Riot, la empresa detrás del LoL, nunca se conformó con poco. Motivo por el cual desde hace varios años venía (y lo digo en pasado) con la iniciativa de ampliar su universo en varios frentes, sobre todo con videojuegos de diferentes estilos para expandir su público. Desde el TFT o la versión para teléfonos móviles, hasta el metroidvania protagonizado por Ekko, el RPG por turnos Ruined King o el roguelike de Sylas. Todos, con un estilo muy diferente entre sí, pero ambientados en este enorme universo de League of Legends. La referencia la dije en pasado porque, lamentablemente, RIOT FORGE (la casa matriz detrás de estos títulos circundantes) decidió frenar con esta iniciativa para solo enfocarse en sus ya establecidos títulos. Es decir, el League Of Legends original, su versión para móviles, y el TFT. El resto, parece que no cumplió con las expectativas y los desarrollos como un RPG MMO o un título de peleas, quedará en los papeles.
Pero por suerte, un título llegó a realizarse antes de esta mala noticia, un título desarrollado por la gente de Tequila Works que se encargaron de darle vida a una aventura en el frío Freljord. Una aventura protagonizada por una amistad, una búsqueda y los fuertes lazos entre Nunu y Willowp. Bienvenidos a Song Of Nunu.
Vamos a sacarnos de encima rápido la pregunta ¿Es necesario conocer del universo de League Of Legends para jugar este título? La respuesta rápida es, no. Ahora, es cierto que habrá muchas cuestiones que se entienden (y disfrutan) mejor si estás inmerso en este mundo. Pero por suerte la historia está narrada de una manera tan natural, y avanza de manera tan gratificante (aunque tenga momentos de tristeza) que de seguro nos convencerá desde un principio. Por eso, lo principal y más destacable es justamente su narrativa. Por motivos de embargo y también por respeto a quienes están interesados en el lore del universo de LoL, no podemos contar demasiado. Sin embargo, podemos advertir que estamos ante una historia con un vínculo muy humano (incluso habiendo un Yeti) y genuino.
Tequila siempre se caracterizó por una pata narrativa muy bien lograda y una vez más, refuerza esta premisa. Pero como se inició la colaboración entre Tequila y Riot? Quien mejor para explicarlo que su fundador!
Por un lado, la historia de un niño, Nunu, en búsqueda de su madre y la conexión con el Hielo Azul, un artefacto mítico del Freljord. Por otro, la travesía de Willow, el último de los yetis, como acompañante inseparable de Nunu. Lógicamente se irán presentando otros personajes del universo a lo largo de la aventura, además de aportar más capas a los personajes ya consagrados en los diferentes juegos. Este vínculo entre Nunu y Willow será el hilo conductor de absolutamente todo el título, pasando por situaciones y emociones de todo tipo.Si bien estamos ante un mundo frío y de hielo, los diálogos entre los protagonistas, sus andanzas, sus problemas y sus victorias, todo estará marcado por fuertes emociones. Por lo cual, empatizar con Nunu y Willow será inevitable.
Ahora bien, la narrativa es una parte importante en los videojuegos, pero solo con eso no alcanza. De hecho, las mecánicas son la otra cara de la moneda en Song Of Nunu. Y aquí encontramos una situación más dispareja y no esa unanimidad positiva que destacamos de su narrativa.
Por un lado, Song Of Nunu parece ser un juego pensado para un público casual, que recién comienza en el mundo de los plataformeros en 3D y que quiere pasar bien el rato sin tantas complicaciones ni dificultades mecánicas. Con decir que la mayoría (por no decir todos) los saltos que realicemos están encriptados, se resume la cuestión. Por si alguien no conoce el término, encriptado significa que ya está predeterminado de antemano por los desarrolladores y no tanto por nuestro accionar al mando. Es decir, el personaje pareciera como que “se acomoda solo” ante un salto. Esto no es necesariamente malo, sobre todo si pretende ser un título para público casual. El problema es que, por otro lado, tenemos unas mecánicas de puzzles con niveles de dificultad bastante elevados que rompen un poco con este esquema. Puzzles que no solo requerirán de entender cómo solucionarlo, sino también de tener la velocidad para hacerlo y la memorización como eje principal. Por lo cual, en un principio me resultaba ser un título para presentarle a alguien que recién llegaba al mundo de los videojuegos… es decir, amigable, con una linda historia y mecánicas sencillas. Pero cuando llegó el momento de los puzzles, el asunto cambió. Por otro lado, los combates también son en su mayoría de gran sencillez, con algunos combos y remates interesantes y vistosos, solo en las batallas contra ciertos jefes tendremos que sacar a relucir nuestros reflejos de Jedi, por lo demás, tenemos combates sin complicaciones.
Lo destacable del asunto es que, todas estas cuestiones no saturan entre sí… Es decir, los combates contra esbirros serán escuetos y muy de vez en cuando, los puzzles y los sectores de plataformas son lo que más abunda en el juego, por lo cual estaremos constantemente pendulando entre plataformas sencillas y puzzles complejos. De todas formas, como la parte narrativa y el desarrollo de los personajes principales está tan bien lograda, el título va avanzando naturalmente y de manera interesante en todo momento, tarea que desde Tequila supieron hacer.
Toda esa combinación detallada se encuentra acompañada de unos escenarios muy bien logrados, llamativos y bastante variados entre sí. Desde las montañas de Freljord hasta un sector con lava volcánica. Una mención especial a la guarida de hielo con un poco de condimento de sigilo, no demasiado complejo tampoco, pero que refresca bastante. De todas formas si hay que destacar la increíble ambientación y como desde Tequila lograron que nos sintamos parte del universo de League Of Legends desde su atmósfera, sus personajes y los peligros que habitan en las montañas heladas. Detallar más sobre los diferentes biomas y situaciones que suceden a través de la historia sería romper un poco con la mística del juego, que constantemente nos invita a pensar en cuál será la siguiente aventura de Nunu y Willow y con qué personaje de runaterra se cruzaran.
Siguiendo con el apartado mecánico, el juego irá alternando entre manejar a Nunu, el cual tiene una flauta mágica que será fundamental para resolver los puzzles musicales y podrá lanzar bolas que también desbloquean algunos lugares o activar palancas. Si bien la mecánica de las notas musicales en un principio nos ha costado, una vez dominado es muy satisfactorio entonar diferentes melodías sin equivocarse en las notas. Por otro lado, manejaremos a Willow (con Nunu a sus espaldas) para los combates, la mayoría de las plataformas y los sectores en los que el juego lleva su diversión al máximo con el surfeo. En líneas generales, si bien todas las mecánicas que el juego propone, ya se vieron antes, la variedad entre ellas y la forma en que se alternan hace que nunca se torne tediosa alguna parte de la aventura. Eso si, hay algunos saltos que parecieran no tener riesgo alguno y sin embargo son “mortales” que por suerte no nos hacen perder demasiado tiempo (Entre comillas, ya que solo hay fundido en negro y reseteo)
Otro gran aporte, y donde claramente se ve la pincelada de Tequila, es en aspecto cinematográfico que tiene el juego. Abundaran las escenas donde la cámara tome el protagonismo y nos muestre bellos paisajes o sirvan para enfatizar momentos de tensión. Todo esto acompañado de una música que también mantiene un punto alto dentro de la aventura. El trabajo de Cris Velazco complementa completamente lo cinematográfico de la aventura, de todas formas, no podía ser menos en un juego en el que las canciones tienen un gran peso. A su vez, el trabajo de doblaje y voces es realmente excelente, con las voces originales de League Of Legends e interpretaciones muy completas. Lo que sí, hemos notado que el volumen de las voces (al menos en español latinoamericano) se encuentran bastante por debajo del resto de los sonidos, por lo cual recomendamos bajarle un poco al resto de los apartados para disfrutar mejor del trabajo de voces. De todas formas, los subtítulos opcionales también nos salvan bastante.
En cuanto a lo técnico, el juego se comporta bastante bien incluso en una Xbox One Fat. Es decir, la máquina más vieja del mercado. Si bien tiene algunas caídas de frames en esta consola, la experiencia no se entorpece para nada y en Xbox Series, en cambio, funciona de maravilla.
Por último, el apartado coleccionable del juego. A lo largo de las 8 horas promedio que dura la aventura, podremos ir descubriendo (siempre y cuando seamos algo curiosos) varios murales que cuentan historias de Runaterra o incluso a nuestros amados amigos Poros. También habrá, en menor medida algunas canciones para desbloquear que nos contarán el vínculo entre Nunu y su madre, un punto álgido en la aventura. Por si fuera poco, cuenta con un libro de arte que muestra todos los diferentes diseños de personajes y escenarios, paleta de colores y demas detalles por si les gusto el titulo.
En síntesis, Song Of Nunu es una aventura llena de emociones que marcan los vínculos de la amistad, la lealtad y el valor. Donde la narrativa y la cinematografía son sus puntos más fuertes, con puzzles que a veces se complican de más y con combates y plataformas que, de manera contraria, se tornan muy sencillos. Es un juego interesante tal vez, para incursionar a alguien en este maravilloso mundo de Runaterra y de los videojuegos en general, pero seguro largara alguna que otra queja en las partes con picos de dificultad. En líneas generales, incluso para quienes no conozcan el universo de League Of Legends, es un juego que cumple en cuanto a lo que promete. Una aventura. En la que si bien los protagonistas pasarán por varios momentos de tensión y nosotros nos emocionaremos con ellos, en los mandos estaremos bastante relajados.
- Desarrollado por Tequila Works
- Publicado por Riot Forge
- Fecha de salida en Xbox: 31 de enero de 2024
- Disponible en Xbox One, Xbox Series, PC, PS4, PS5, Switch