Por Andres Belluzzi
Lo políticamente incorrecto es, paradójicamente, algo delicado de abordar. Los tiempos cambian y con ello lo que se puede o no decir o hacer según lo socialmente construido. La línea suele ser muy delgada en algunos casos. El humor, por su parte, siempre ha tenido la característica particular de poder sobrepasar estos límites, jugar con ellos a su antojo y salir ileso. Aunque claro, tampoco ha quedado exento de alguno de estos debates. Partiendo de esa pequeña reflexión ¿Cuáles son los límites dentro de un videojuego en relación a esto? La respuesta no la sabemos, pero si traemos un análisis que puede invitarnos a pensar un poco sobre este tema. Un videojuego cargado de humor ácido y sin miedo a ser controversial. Con ustedes, Hell Pie.
Si ya peinas alguna que otra cana, o te gustan los juegos de culto, seguramente encontraste un gran parecido entre nuestro amadísimo Conker y Nate, el demonio protagonista de Hell Pie, Y es que honestamente eso fue lo primero que se me vino a la cabeza cuando empecé a jugar este título. La inspiración salta a la vista, por su estilo de humor ácido que remarcamos en la intro pero claro, con una ambientación mucho más particular ya que nos encontramos en las oficinas del mismísimo infierno y nuestro querido protagonista es un empleado más de un mundo burocrático. ¿Nuestra misión? Conseguir todos los ingredientes necesarios para la torta (o Pie) de cumpleaños del mismísimo diablo. De ahí su título, claro. Aunque también hay que aclarar que dichos ingredientes serán… un poco asquerosos. Pero bueno, estamos hablando de demonios así que suponemos que está bien.
El título se divide a lo largo de 3 mundos grandes y uno pequeño, cada cual con una ambientación muy particular y que por lo general tendrá la presencia, directa o indirectamente, de algún pecado capital. En cada mundo grande tendremos un total de 6 ingredientes por encontrar, 3 de ellos estarán distribuidos por ahí, mientras que otros 3 están divididos en 3 subniveles menores dentro del mismo mapa.
Ahora bien, lo interesante de Hell Pie es, además de su humor ácido del que hablaremos luego, su jugabilidad. Como plataformero en 3D, el título cumple en todo sentido. Como dijimos, cada mundo tendrá su ambientación y recorrerlo será muy gratificante por dos cuestiones en particular. Por un lado la mecánica del balanceo y por otro el grado de coleccionismo que propone en todo momento. Porque si bien nuestro objetivo se enfocará en los ingredientes, también tendremos varios items que nos serán de gran utilidad en la aventura. Por un lado nos encontraremos con unos simpáticos unicornios u ovejas bebes que… nono, que está pasando? (ver video YouTube) Si, efectivamente. Hay que sacrificarlos para conseguir un nuevo par de cuernos para nuestro demonio y con ellos una habilidad en particular. Desde unos cuernos propulsores, hasta otros que sirven para iluminar lugares oscuros. Todos nos servirán en diferentes puntos del juego por lo que desbloquearlos se dará casi naturalmente. Mientras que por otro lado tendremos comida enlatada que servirá para levear nuestro árbol de habilidades, si bien no es algo completamente necesario, facilitará mucho las cosas en secciones complicadas, ya que podremos acceder a varios tipos de saltos de los que podemos aprovechar.
Y si, indiscutiblemente ya es hora de hablar de él, el co-protagonista de la historia. Nugget. Un no tan simpático querubín (o ángel de la guarda bebe) que nos acompañará en toda la aventura y que nos brindara la mecánica principal del balanceo. Es a él al que debemos agradecer de poder sortear con mayor facilidad algunas zonas de plataformas bastante complicadas. Además de eso, nos ayudará con los ataques y nos dirá alguna que otra pista en las partes de puzzles del juego, que si bien no abundan demasiado, las que se presentan son interesantes. Pero Hell Pie no se queda solo en eso, sino que también propone en algunos momentos volverse un shooter en tercera persona e incluso tiene un nivel dedicado al survival horror.
Porque si hay algo en lo que puede destacar Hell Pie, es en su variedad. Su variedad en los estilos jugables, en las plataformas, en sus mecánicas, en el diseño de los enemigos y los niveles. Todo el tiempo habrá algo nuevo y variado para evitar que nos lleguemos a aburrir. El hecho de recorrer un mundo, buscar sus ítems escondidos, juntar lo necesario para tener una nueva mejora y luego encontrar un subnivel con sus características propias, una fiesta, una isla tropical o el interior de una ballena. Los límites no parecen ser un impedimento.
Si hablamos de límites, es hora de meternos en el barro y hablar de su humor ácido y políticamente incorrecto. Como dijimos, ya desde el comienzo nos dimos cuenta de que tipo de aventura nos íbamos a encontrar. Temas como las drogas, el sexo o el gore abundaran de manera implícita y explicita en toda la aventura. Pero Hell Pie no se conforma con poco y decide redoblar aún más la apuesta en ese aspecto y tocar temas mucho más delicados como la trata de personas y la desnutrición infantil. Definitivamente el nivel del matadero hizo que me tome un tiempo para buscar la forma de encarar este análisis porque desde lo personal me pareció demasiado. ¿Está bien? ¿Está mal? Realmente no lo sé. Supongo que es un tema 100% personal de cada persona hasta donde le hace o no ruido este tipo de humor. Lo que sí se puede destacar, es el riesgo dispuesto a correr y aca una pequeña pregunta reflexiva para responder en comentarios. Este tipo de juego políticamente incorrecto ¿Solo se puede ver en el ámbito indie? ¿Logran imaginar un triple A que se anime a hacer algo así de fuerte? Debatamos en comentarios.
En el resto de los factores, Hell Pie es un título muy entretenido, que apunta a la recolección de ítems en todo orden y a los completistas que buscan esos 1000G. No solo por los ítems, habilidades por desbloquear. De hecho, el juego lo podemos terminar incluso sin tener el 100% de los ingredientes. Pero de todas formas habrá diferentes trajes para nuestro demonio o nuestro angelito que nos invitan a juntar las típicas gemas, que realmente cuentan con una variedad muy amplia. O mejor aún, que habrá al final de la puerta del pecado de la Avaricia, juntando todos los gatos de oro del juego. Por lo cual estamos ante un juego difícil de completar, pero muy entretenido en esa búsqueda. Tampoco estamos ante un juego necesariamente corto. Terminar Hell Pie nos tomó casi 14 horas sin siquiera completar todos los ingredientes (ni que hablar de los demás ítems) por lo cual es un juego que tiene mucho por ofrecer en cuanto a sus desafíos, su jugabilidad plataformera interesante, su adictiva recolección de ítems y su particular humor que, si bien no es para cualquiera, está excelentemente logrado dentro de su ámbito ácido y recuerda ampliamente a nuestro querido Conker, del cual muchos esperan un regreso. Mientras tanto, tenemos este juego independiente que sabe homenajearlo realmente bien.
Por otro lado, nos encontramos con un rendimiento bastante limitado en nuestra Xbox One Fat. Ojo, es perfectamente jugable. Pero no esperen unos 60 fps. No pudimos probar su rendimiento en una Xbox Series, pero creemos que será mucho más fluido. Por último, su precio. Hell Pie se comercializa en la tienda argentina de Xbox a $359 más impuestos, lo cual lo hace realmente muy accesible teniendo en cuenta los precios actuales en la región. Es un título que ofrece una hora considerable de entretenimiento por ambos lados, de su narrativa picante y su jugabilidad adictiva.
- Desarrollador: Sluggerfly
- Distribuidores: Thunderful Group, Headup Games
- Plataformas: Xbox One, Xbox Series, PS4, PS5, PC, Switch
- Fecha de lanzamiento original: 21 de julio de 2022
*Código de review proporcionado por Headup Games*