ANÁLISIS: Alan Wake Remastered

Por Gabriel Llarena Ruiz

Hace más de un año atrás hicimos un video sobre lo especial que era Alan Wake y ahora con el lanzamiento de su remasterización se siente como una oportunidad perfecta para hablar más del juego en profundidad. Claramente hay cosas que ya dijimos en nuestro video por su décimo aniversario en 2020 y ahora es turno de volver a vivir la experiencia.

Es lindo volver a jugar y volver a revivir como la obra de un escritor en verdad se hace realidad trayendo el terror a un pequeño pueblo y todo se vuelve una carrera contra el tiempo para evitar que la oscuridad se salga de control y quien sabe lo que pase una vez que todo el mundo sea afectado. Una buena mezcla de elementos que lo han llevado a catalogarse como un clásico de culto y que con el paso de los años paso a tener la atención que se merecía.

Toda la historia se centra en Alan Wake, quien solo quería irse de vacaciones con su esposa, Alice, pero las presiones para que vuelva escribir por su constante bloqueo mental terminan en una extraña tragedia. Ahora nuestro protagonista no recuerda que sucedió esa noche y descubre que ha escrito una obra, una nueva novela que de alguna manera se vuelve real y no es simplemente su mente jugándole un truco.

Ningún cambio fue hecho a la remasterización, dejando el lado las visuales más actualizadas. Cada cinemática, cada conversación, cada uno de los momentos sigue estando presentes tal como uno lo recuerda. Todo esto mientras el juego es acompañado de fondo por una ambientación que nos trae tensión al explorar los bosques solos en la noche y la sobresaliente música de Petri Alanko tratando de causar una sensación de desesperación, melancolía y misterio. A todo esto se le suma que hay un notable soundtrack licenciado que acompaña como un aderezo más a un juego que busca ser una experiencia cinematográfica. Hasta seguro recuerdan esa escena donde debemos pelear defendiendo un escenario de las oleadas de personas poseídas por la oscuridad al ritmo del rock and roll. Queremos señalar que toda la banda sonora del juego original sigue formando parte de la remasterización, algo que en épocas actuales es difícil mantener, porque lo que corresponde a cuestiones de licencias pueden hacer que hasta tengas que retirar el juego de la venta.

Es importante que lo mencionemos ahora porque Alan Wake fue una exclusiva en su momento bastante diferente a lo que el usuario de Xbox estaba más acostumbrado. No solo era un shooter en tercera persona donde uno usaba cualquier elemento que pudiera servir como una luz para combatir o darnos unos momentos para escapar de fuerzas sobrenaturales. El enfoque cinemático, la atención a los pequeños detalles narrativos, la construcción del mundo y sus personajes. Ver un juego de este tipo no era algo de todos los días. Uno también puede ver como se mezclan elementos de live action en el juego solo como un detalle, un método que Remedy seguiría aplicando en futuros juegos.

Algo que se sigue apreciando es como los desarrolladores le pusieron empeño en crear un mundo con bastantes elementos de fondo. Uno puede ir explorando cada escenario y encontrar radios para escuchar un pequeño segmento en vivo de un programa local, los coleccionables como las hojas de la novela que vamos encontrando nos dirán más detalles de sucesos que están fuera de la vista del jugador, hay conversaciones entre algunos pobladores que comienzan en un episodio y terminan en otro. Eso es otra palabra importante que esta de comienzo a fin: episodio. Cada parte del juego funciona como un programa de televisión: Tienes el conflicto inicial, lo que transcurre en el medio y un cierre con un cliffhanger y los créditos con una música que encaja a la perfección con lo que paso. 


A pesar de sonar como una experiencia narrativa, Alan Wake sigue siendo un juego de acción. Los combates tienen lugares en espacios muy cerrados en ocasiones teniendo que calcular bien cuando esquivar las hachas o golpes de los enemigos. También uno deberá estar atento a como La Oscuridad aprovechará cualquier momento para sorprendernos, ya sea con enemigos que salgan de la nada, el ataque de pájaros, un poltergeist que afectará objetos inanimados como barriles y hasta vehículos que son como un pequeño jefe final.

Un dato curioso es que la remasterización no sufrió cambios importantes en el gameplay o decisión de diseño. Aún cuesta creer como el juego no ha envejecido y los combates se sienten muy fluidos, siguen siendo un aspecto muy positivo del juego. Si a todo esto le sumamos que los efectos de sonido y como el estruendo de los disparos se escucha tan bien y es una satisfacción para nuestros oídos, uno se da cuenta de que Remedy sabe muy bien lo que hace si se trata de un juego de disparos. Pero esto no cambia el hecho de que todas las físicas de conducción son realmente horribles todavía. Lo único destacado que se eliminó fueron todas las publicidades a marcas de la vida real y referencias a la Xbox 360 como en su versión original.


A todo esto, cabe mencionar que el desarrollo de esta remasterización no está hecha exactamente por Remedy en su totalidad. Si no que más bien se contrató a un estudio externo: D3T, quienes ya han trabajado en las remasters de los primeros Shenmue para SEGA, un remaster de Mafia II para 2K y ahora suma a Alan Wake a su currículo. Claramente no ha sido la mejor elección como estudio.

Dentro de todo se ha hecho un buen trabajo a la hora de mejorar el framerate para Xbox Series e incrementar la resolución en general. Sin embargo, el juego sufre de algunos problemas de screen tearing llegando a los últimos capítulos del juego y en Xbox One no habría tanta estabilidad por momentos. El mayor problema es que el aumento de nitidez en la imagen ha dejado en claro que hay ciertos problemas de carga de texturas en cinemáticas por ejemplo. Esto era algo que ya en el juego original estaba presente, pero su tono más oscuro y una niebla más espesa en ocasiones tapaban estos problemas. Aquí no se molestaron en arreglar nada de eso. Aunque todo el follaje se vea bien en la remasterización, uno comenzará a apreciar mucho más la versión de 2010. Alan Wake era majestuoso visualmente para sus tiempos y esto nos demuestra porque.

Un punto que puede resultar molesto para algunos o quizás para otros no es la estructura de como se ha juntado todo el juego y los episodios adicionales. Esta remaster ya viene con las dos expansiones de historia, que sirven como un verdadero cierre a la historia y un supuesto puente a una secuela que jamás llegó. Nos hubiese gustado que al menos al terminar la historia del juego se pueda comenzar con estos capítulos y no tener que volver a pasar los menús. No costaba nada tratar de hacerlo.

Sin decir muchos spoilers, La señal y El escritor son dos contenidos que son muy interesantes. Explotan mejor el factor psicológico, el surrealismo y la dirección de arte. También se introducen nuevas mecánicas de juego que se basan en iluminar las palabras con nuestra linterna para hacer aparecer objetos que nos ayuden en combate o como otra herramienta argumental. Como dijimos hace un año, el segundo capítulo adicional es que él saca más jugo de todos los factores. Incluso se siente más como una experiencia de survival horror al tener que gestionar un poco más los recursos.

El que las expansiones fueran añadidas puede ser la principal tentación para comprarlas porque de casualidad no en todas las regiones están a la venta, así que algunos lo van a pensar seguro y van a preferir comprar la remasterización de 1199ARS+impuestos o sus equivalentes regionales o comprar el juego original y las expansiones por separado. Hagan las cuentas, la remaster conviene en ese sentido. En el fondo la verdad es que más allá del valor nostálgico, no hay mucho más. Revisitar Bright Falls trae muy buenos recuerdos, uno se puede dar cuenta de cosas que antes nunca presto atención. Claramente hay un valor rejugable porque algunos coleccionables solamente se pueden conseguir en el Modo Pesadilla para los que se animen a jugarlo.


Algo que se aprecia también es que todo el doblaje latinoamericano siga presente y cuando escuchas sus voces te das cuenta de que los doblajes para la región fue de primera calidad sin duda alguna. Curiosamente uno debe configurar la consola Xbox en el idioma español México. Ya es como la segunda vez en poco tiempo que tenemos que remarcar esto.

Es bueno que Alan Wake tenga más reconocimiento. Llevamos una década esperando una secuela de verdad, no cameos horrendos, no juegos como American Nightmare. No hay mucho más que decir.

  • Desarrollado por: D3T, Remedy Entertainment
  • Publicado por Epic Games
  • Disponible en Xbox One, Xbox Series, PS4, PS5, PC
  • Fecha original de estreno: 5 de octubre de 2021