ANÁLISIS: Chivalry II

Por Ariel "Kaji" Fuentes

El mes pasado pudimos probar la beta cerrada de Chivalry 2, un juego de combates medievales que, tras un manto de aparente sencillez, esconde mucha diversión y un sistema de pelea bastante complejo. En esta ocasión accedimos a su versión completa para ofrecerles nuestra opinión definitiva.

Sucesor de un juego de 2012 que se basaba en el viejo motor gráfico de Half-Life, Chivalry 2 fue anunciado durante 2019 y llega ahora a nuestras manos para competir en el nicho de simuladores de combate medieval. A diferencia de juegos comparables, como Mount & Blade o Mordhau, Chivalry 2 nunca deja de aportar una cuota de humor, tanto en situaciones inesperadas de las batallas como en detalles como el nombre de los logros. Por ejemplo: si morimos en el fuego, desbloquearemos el logro “This is fine”, en referencia al mítico meme.

La historia es una mera excusa; un universo inspirado por la Europa de la Edad Media, con dos facciones principales (los Caballeros de Ágata y la Orden Masónica) disputándose territorios a través de conflictos violentos. Nada particularmente original o relevante.

Antes que nada, recurramos al tutorial para entender los aspectos básicos del juego. Aunque nunca termina de tomarse a sí mismo en serio, Chivalry 2 se edifica sobre un sistema complejo, que incluye una amplia variedad de ataques, defensas y movimientos. Cuando sumamos esto al repertorio de distintas clases y equipamiento, tenemos una gama muy rica de posibilidades para aplicar en el campo de batalla.

Hay cuatro clases de soldados, cada una de las cuales brinda acceso a determinada estética (cascos, armaduras, emblemas, características físicas, género) y a ciertas armas.

Por un lado, tenemos al Caballero, el más lento y pesado de los personajes. Puede utilizar un escudo y cuenta con más puntos de vida que los demás; En segundo lugar, la Vanguardia: mucho más vulnerable, con énfasis en la velocidad y en hacer el máximo daño posible corriendo altos riesgos. Entre ambas, una opción más balanceada: el Soldado de a Pie, cuyas habilidades son equilibradas y se orientan a curar y dar soporte a las otras clases; Por último, la clase más especial del juego: el Arquero, letal a larga distancia pero extremadamente frágil.

Cada uno de estos tipos de soldado se dividirá a su vez en sub-clases, con ventajas y debilidades particulares. Según juntemos experiencia y dinero dentro del juego podremos ir desbloqueando más opciones.

Las partidas de Chivalry 2 suelen ser caóticas. Los mapas no son enormes, pero la cantidad de soldados, más algunos efectos que agregan dramatismo (como fuego, humo, y especialmente el sonido, lleno de gritos de batalla) generan un ambiente guerrero casi sin espacios para descansar. El núcleo de Chivalry 2 es su sistema de combate, centrado en el mano-a-mano entre combatientes de armadura que utilizan armas de la etapa feudal. Blandir una espada, un hacha, o una alabarda se siente gratificante, y conectar golpes es catártico. Es un título ideal para partidas cortas, de aproximadamente entre 10 minutos y media hora, después de un largo día de trabajo. El juego no nos pedirá mucha concentración, porque incluso al perder peleas vamos a obtener mucha diversión. Vamos a estallar en carcajadas incluso cuando nos decapiten injustamente.


Después de jugar unas 5 horas, empezamos a dominar los aspectos básicos del combate y podíamos ejecutar combos y amagues con regularidad.

Chivalry 2 no tardó más que unos pocos segundos en encontrar partidas para cada uno de los modos disponibles, que se dividen en batallas de 64 jugadores, de 40 jugadores, o bien un “free-for-all” o “todos contra todos”. Aunque las batallas por equipos están más estructuradas, terminamos prefiriendo la rapidez y diversión pura de los free-for-all, en donde nuestro único objetivo será conseguir 35 eliminaciones antes que nuestros rivales.

En todos los modos, hay tantos jugadores juntos que la suerte termina siendo un factor decisivo. Incluso el guerrero más cuidadoso puede terminar envuelto en situaciones insalvables y caer ante un hachazo inesperado por la espalda.

Cuando enfrentemos a un rival habilidoso, se entablarán juegos bastante largos y peligrosos: un error puede implicar la muerte. Por suerte, morir no tiene mayor implicancia en Chivalry 2: solo perderemos algunos segundos antes de respawnear para volver corriendo a pelear.


Al incluir cross-play, creemos que  Chivalry 2 podrá sobrevivir un buen tiempo con una población numerosa de jugadores provenientes tanto de consolas como de PC. Si eso no fuera suficiente, el juego incluirá combatientes controlados por la inteligencia artificial: los famosos bots, distinguibles estéticamente y por su baja habilidad.

Al parecer, se trabajó en el apartado técnico desde la versión de la beta cerrada, y actualmente el juego corre significativamente mejor. Tomando como base nuestra Xbox One X, corrió sin problemas en la tasa de frames por segundo. Como dijimos en su momento, no es precisamente un portento técnico, y sólo las animaciones -que son esenciales para interpretar los movimientos de nuestros contrincantes- son dignas de destacar, cuanto menos en su variedad y en la claridad con la que permiten anticipar determinados ataques. Efectos, texturas y gráficos en general son de un nivel básico. Vale mencionar que en algunas ocasiones notamos problemas en la carga de texturas -por ejemplo, en la sección de personalización de soldados-.

A nivel de sonido, nada que destacar. Dos efectos dominarán nuestra experiencia de juego: el sonido metálico de las armas al chocar entre sí o al colisionar con las armaduras, y los gritos de guerra, exagerados y actuados por varias voces de entre las cuales vamos a poder elegir.

A diferencias de otros juegos similares, y contra lo que uno pudiera esperar, todavía no hay presencia de caballería montada en Chivalry 2: no podemos pelear a caballo. Sí se promete su inclusión a futuro, según la hoja de ruta que los desarrolladores mostraron. También se anunciaron futuros modos para menor cantidad de jugadores, nuevos mapas, y mejoras técnicas en general.

Chivalry 2 mantiene, tras lanzamiento, su tentador precio original: $574, sin contar impuestos, en el store argentino de Xbox. ¿Cuál es nuestro balance?

Nuestra postura ante el juego es binaria. Este es un caso típico de amor u odio: es probable que Chivalry 2 nos parezca un producto demasiado sencillo o repetitivo si lo comparamos con títulos AAA contemporáneos, pero si nos dejamos seducir por su propuesta, es capaz de atraparnos por docenas de horas. Por un lado, relativamente poco contenido, valores de producción limitados, una presentación técnica humilde y pocos modos de juego. Por otro, y rescatando lo positivo, mecánicas de combate bien logradas y adictivas, y diversión asegurada siempre y cuando haya una comunidad de jugadores interesada y activa.

  • Desarrollado por: Torn Banner
  • Publicado por: Tripwire Interactive / Deep Silver
  • Fecha de lanzamiento: 8 de Junio de 2021
  • Plataformas: Xbox One, Xbox Series S/X, PS4, PS5, Microsoft Windows

*Este análisis se realizó con un código otorgado por Tripwire Interactive*