REVIEW: Chronos Before the Ashes

Por Gabriel Ocampo

Toda buena historia tiene un gran comienzo… Y de eso se trata el juego que analizaremos hoy. Remnant from the ashes nos presentaba un mundo sombrío donde los humanos deben luchar para sobrevivir a fuerzas extrañas. 

Los pocos seres humanos restantes viven como nómades en grupos pequeños. Nosotros como el elegido de la raza deberemos emprender el viaje hacia la torre donde habita el dragón que ocasionó toda la maldad que hay en el mundo. Para hacerlo usaremos un cristal de la piedra del mundo que se activa una vez al año, detalle que retomaremos luego. Pero no sera tarea sencilla. En el recorrido por el laberinto que encierra dicha torre encontraremos toda clase de enemigos, distintos rompecabezas y tres guardianes que harán las veces de bosses antes que podamos enfrentar al gran jefe final… el dragón.

Y así comienza nuestra aventura, dentro de una base inhóspita donde la única puerta de acceso, la del sector 13, está bloqueada por una tarjeta de seguridad que deberemos encontrar más adelante. La única opción es activar una de las piedras de poder y viajar a otra locación, donde nos adentraremos en este inmenso laberinto. Lo primero que aprenderemos será a usar la espada (o hacha, según nuestra elección) y el escudo. Las mecánicas son del tipo Souls: con el arma podremos hacer ataques ligeros, pesados, o pesados cargados. Con el escudo podremos cubrirnos o intentar realizar un parry para aturdir momentáneamente al atacante. Además tenemos las maniobras de evasión y correr, pero no la de saltar.


Luego de avanzar un poco obtendremos también determinadas piedras de poder que se impregnará en nuestro brazo izquierdo, la primera estará vinculada al fuego, pero luego desbloquearemos algún otro poder elemental. Tras realizar varios ataques se irá cargando la barra especial, tras lo cual podremos activar la habilidad del poder especial con una determinada característica. En el caso de la del fuego, nos permitirá atacar más rápido y hacer más daño. Asimismo luego de hacer un parry o un esquivo exitoso, el siguiente ataque también contará con dicho efecto especial.

El sistema de combates es muy bueno, con mecánicas que recuerdan la saga Souls. La inteligencia artificial de los enemigos no es la mejor, pero no llega a ser desagradable. Algunos enemigos arrojaran tras su muerte “fragmentos de dragón” que podremos ir juntando y utilizar para mejorar nuestras armas. Asimismo a lo largo de la aventura y como parte de los rompecabezas podremos encontrar más armas con mejores carácterísticas, pero realmente no es muy variado, lo cual lejos de ser una desventaja, nos permite concentrarnos más en la aventura, la cual requerirá toda nuestra atención, porque este juego no trata solo de combates. Los rompecabezas tendrán una parte fundamental en el desarrollo de la campaña, al punto de hacernos dar varias vueltas por el inmenso mapa, a veces hasta perdernos, buscando qué detalle, pista, u objeto pasamos de largo y necesitábamos para avanzar. Realmente logra su cometido y si sos fanático de buscar objetos por todos lados vas a pasartelo muy bien.

Las batallas contra los jefes son muy originales. Juegan con las ilusiones visuales y crean sensasiones muy interesantes. No todo es lo que parece en este juego. Cuando pensás que algo es bien sencillo, morís de un golpe… Y cuando estás muerto de miedo, las cosas son más sencillas de lo que pensabas. Punto a favor por ese juego psicológico.


Respecto a la muerte, tiene una mecánica muy interesante. Como te mencioné al principio, el cristal de la piedra del mundo se activa sólo una vez al año, por lo que si morís en batalla, al volver al último punto de control lo harás con un año más. Y acá entra otra característica del juego. Cuando sos joven (empezas la campaña con 18 años) con cada subida de nivel podés asignar puntos de fuerza, vitalidad y destreza con facilidad, pero los puntos arcanos (relacionados con la sabiduría) te cuestan el triple cada uno. Al contrario a medida que vamos envejeciendo (tras morir varias veces) se va tornando más difícil subir puntos de fuerza o destreza, y los arcanos suben más fácil. Asimismo, cada vez que envejecemos 10 años podremos escoger uno entre tres aributos únicos relacionados con esa etapa de la vida. Realmente es una mecánica muy bien adaptada que refleja las características de una persona a medida que envejece. Pierde algo de capacidad física, pero se vuelve más sabia… O al menos debería ser así… Para recuperar salud, las únicas opciones son subir de nivel, o usar un corazón de dragón imbuído, de los cuales tendremos un número limitado y que sólo se recargan al morir.

Para quienes jugaron Remnant from the Ashes, Chronos tiene una gran cantidad de guiños hacia aquel, y comparten el mismo lore, eso lo vuelve una experiencia muy amena. Por otro lado, como es una precuela, si no jugaste a Remnant no pienses que no podés disfrutar de Chronos. Por el contrario, es una muy buena forma de acercarte a la franquicia, aunque aclaramos que son juegos muy diferentes, sobre todo en mecánicas.

El apartado gráfico es bueno. El estilo artístico de los personajes y del entorno le dan un toque amigable y de aventura. Los escenarios son muy diversos y llenos de detalles. Tantos que a veces encontrar los objetos clave es todo un desafío. Hay una gran variedad de locaciones y cada una respeta una temática bien detallada, metiéndonos de lleno en cada sección de la historia.


En cuanto al audio, debemos destacar muy positivamente dos aspectos. Por un lado la música y los efectos de sonido acompañan muy bien la aventura, ayudando a crear el ambiente y mantenernos atrapados mientras damos vueltas combatiendo o buscando pistas. En segundo lugar los diálogos completos en español, también con subtítulos, dan una experiencia muy inmersiva, permitiéndote disfrutar de la historia en nuestro idioma. Las voces del doblaje están muy bien trabajadas.

Lamentablemente, si bien el juego logró cautivarnos desde el principio, debemos mencionar que varios bugs, algunos leves, y otros graves, comenzaron empañando la experiencia y luego terminaron crasheando el juego. Son aceptables los errores de texturas, o hasta incluso la aparición de clones misteriosos en varias oportunidades… Si aquí también… Y por acá otros más… También en alguna ocasión aislada las “piedras de dragón” desaparecían de nuestro inventario repentinamente. Pero lo verdaderamente negativo fué que habiendo pasado el segundo jefe y con un buen nivel y varios de los items clave, la partida se bugueó y nuestro nivel bajó a la mitad. Además de eso perdimos un arma que habiamos obtenido y tambien los items claves para avanzar en la historia. Entre ellos la tarjeta de la sección 13 que mencionamos como requisito al principio de la partida para avanzar… Realmente ésto restó muchos puntos a una experiencia que hasta el momento venía siendo muy sobresaliente, dejándonos con un sabor agridulce. Dejando ésto de lado el juego está muy bien pensado y logró mantenernos concentrados durante horas perdiéndo la noción del tiempo.


En resumidas cuentas estamos ante una precuela a la altura de del lore propuesto en Remnant from the Ashes. Una mecánica diferente, encarada desde un RPG de acción con pinceladas Souls y diversos rompecabezas que te harán pensar un buen rato. Un ingenioso sistema de progresión y una historia muy bien lograda y narrada. Esperamos que con algunos parches logren resolver los varios problemas serios que experimentamos en nuestra partida para poder recomendartelo al 100%.

Sin más que agregar, te agradecemos habernos acompañado y esperamos hayas disfrutado la review, tanto como nosotros al hacerla. Dejanos tus comentarios si también estabas esperando este juego y qué te parece el universo que se está gestando alrededor de ésta franquicia.

  • Publicado por: THQ Nordic
  • Desarrollado por: Gunfire Games
  • Disponible en: Xbox One, PS4, PC, Switch, Stadia
  • Fecha de lanzamiento: 1 de diciembre de 2020

*Agradecimientos a THQ Nordic por facilitar un código de review de este juego*