REVIEW: My Hero One's Justice 2


Los juegos basados en animes son productos que apuntan a dos extremos: ser buenos o malos. Siempre van a quedarse en esos puntos parece. ¿Qué es lo que falla? ¿Qué es lo que sale bien? Más allá de que el material original debe ser respetado lo mejor posible o pueden jugar para crear una historia original, el concepto y la presentación es el problema clave con todos estos juegos. El tener que transmitir momentos épicos o únicos de un formato a otro es un reto para los desarrolladores y en muchos casos simplemente no logran adaptar lo mismo que sentimos viendo un anime o leyendo un manga hacia un videojuego.

My Hero Academia es una de las obras contemporáneas de superhéroes más reconocidas en el ambiente del manga y anime. Era imposible pensar que nadie intentaría adaptar todo a un videojuego en algún punto, y fue de este modo que el desarrollador Byking y la editora Bandai Namco se han hecho cargo. Nuevamente uniendo lazos, ¿la secuela ha podido igualar al primer juego o fue muy pronto para ver una segunda parte?

LO BÁSICO

Siendo un juego de peleas de arena en 3D, One´s Justice 2 se basa más en la suerte y en la rapidez de predecir algunos movimientos y poder atacar lo más rápido posible a tu oponente. A primeras instancias es un juego amigable con los que no tienen experiencia debido a un esquema de controles muy fáciles de usar y sin muchas vueltas.

Cada personaje tiene su tono característico gracias a sus dones peculiares, y este aspecto se ha sabido llevar nuevamente la sensación de poder jugar con un roster de personajes únicos por sus habilidades. Es lo que hace al combate atractivo para jugar contra la CPU o contra otros jugadores en línea, así como darte el tiempo de conocer a los 41 personajes jugables; Inclusive todos los combos y super movimientos son muy satisfactorios cuando les tomamos la mano.


En las misiones del Modo Historia podremos conseguir más recompensas, como objetos de personalización, si completamos todos los objetivos.

UNA HISTORIA NO TAN BIEN ADAPTADA

El primer gran problema de My Hero One’s Justice 2 es que el juego carece de contenidos para su Modo Historia para empezar. El juego comienzo justo al final de la pelea entre All Might and All For One, que tuvo lugar a mediados de la tercera temporada del anime. A partir de ahí iremos tomando el rol de diferentes personajes como en su antecesor participando en peleas adaptando varios momentos que ya transcurrieron en el anime o simplemente viendo cinemáticas desde algunas perspectivas. Si bien la campaña puede verse desde los puntos de vista de los héroes y villanos, la cantidad de sucesos que transcurren no es tan grande como para justificar un juego. No es lo mismo cubrir alrededor de dos temporadas y media que la segunda mitad de la tercera temporada y casi toda la cuarta temporada para darles una idea. Y si bien, la cuarta temporada de My Hero Academia tuvo momentos muy interesantes y buenos desarrollos con algunos personajes, el juego se aleja mucho de enseñarnos bien todo. También hay otros problemas como la corta duración de las batallas y el desempeño de la IA durante gran parte de este modo.


La forma en que la han dividido al modo historia simplemente no es agradable, y aquí tenemos otro problema: los menús. No sabemos porque han decidido agregar un cursor, pero solamente ralentiza más de lo esperado algunas respuestas. Más problemático aún, es que las secuencias se dividen entre aceptar una pelea, aceptar ver un video, aceptar las recompensas y más. Es demasiado denso y la verdad hubiese preferido que optaran por cambiar por completo el sistema por algo que tenga una mayor fluidez y que no tengas que pasar entre menús y tiempos de carga muy excesivos para ver hasta una escena de video al estilo manga. La falta de escenas cinemáticas generadas con los gráficos del juego es una enorme decepción, que si bien las presentes cumplen para darle ese Plus, la verdad si muchos momentos de la cuarta temporada hubiesen tenido este tratamiento, My Hero One’s Justice 2 tendría algo más que podríamos rescatar con facilidad. Lo cierto es que el modo historia es la parte más aburrida de todo el juego, una oportunidad totalmente perdida y que cualquier fan se encontrará decepcionado.

En lo personal debieron agregar los contenidos de las películas para sumarle más contenido y la pelea entre Deku y Gentle Criminal, dos episodios que llegaron sobre las semanas del lanzamiento del juego. Aunque la batalla entre Deku y Overhaul fue la más importante de toda la temporada, creo que hubiese sido un mejor cierre dar espacio a una pelea que represento más una pelea de ideologías y sueños.


MODOS MEJORADOS

Aunque el modo historia fue una enorme decepción, el juego cuenta con varias modalidades para entretenernos por nuestra cuenta o en cooperativo local, como Batalla Libre o Entrenamiento. Pero hay otras dos modalidades que nos pueden satisfacer mucho más: El Modo Arcade y el Modo Misiones. El Modo Arcade nos dejará elegir a cualquier personaje del roster y sus personajes de soporte, luego nos dejará seguir una ruta de combate donde debemos pelear con diferentes oponentes de todo el juego. A diferencia del modo historia, la IA no es tan torpe o lenta y podremos ver como los personajes tratan de molernos a golpes lo mejor que pueden. Aunque hay algunos momentos donde parece que solo corren de un lado a otro sin un plan en progreso, abiertos a que sean muy fáciles de golpear.

El Modo Misiones me resulto ser lo más atractivo, que añade algunos toques de RPG al juego. En esta modalidad trabajamos para una agencia de héroes, los cuales deben comprarse con las Monedas de Héroes del juego que ganemos en cualquier modalidad. El objetivo final en cada misión es derrotar a diferentes personajes en un orden casi libre, y únicamente tendremos una vida sin regeneración de salud a lo largo de cada misión y un solo un personaje de soporte que podrá ayudarnos.

Pero en donde se encuentra su pequeño truco es el uso de varios mods llamados Simbolos que iremos desbloqueando a medidas que avancemos y en la compatibilidad que puede haber entre ciertos personajes. Estos últimos aspectos pueden facilitar o aumentar el reto si lo deseamos. Por ejemplo, algunos mods permiten llevar nuestra VP a tan solo 1 como un castigo, dar impulsos a la fuerza de ataque o bloquear la presencia de determinados personajes en cada misión. En cambio, la compatibilidad juega un rol sobre los atributos finales en conjunto de cada personaje como la fuerza o defensa.


TÉCNICAMENTE ATRACTIVO

A nivel audiovisual, My Hero One’s Justice 2 se destaca por una gran estabilidad y un amplio uso de efectos en pantalla que logran que te enganches con las peleas. Más allá de cada personaje es diferente, la variedad de escenarios y el poder destruirlos lo hace más agradable si llega a ser el caso. El juego fue testeado mayormente en una Xbox One FAT y raramente he tenido algún problema a la hora de jugar en solitario, he visto a lo sumo alguna leve caída de frame, pero es una experiencia muy pulida. Agregó también que el juego solamente tiene un doblaje en japonés y los textos están en español, pero las voces son las oficiales y quienes miremos el anime no vamos a tener problemas con volver a escucharlos todas las veces que sean necesarias.

En cuanto al aspecto Online, el multijugador ha contado con algunos problemas. Aunque no he tenido desconexiones serias en plena batalla, se puede notar que hay algunos problemas de lag en ciertos momentos. Realmente parece algo común con varios de los juegos de Bandai Namco hoy en día ya que no son juegos con servidores dedicados.

CONCLUSIONES

Lejos de ser una secuela completa, My Hero One’s Justice 2 se siente como una versión mejorada del primer juego que no se logra justificar. No es un juego que llegue a ser malo porque tienen los elementos para ser un juego aceptable, pero uno queda muy insatisfecho ya que el Modo Historia es totalmente olvidable y fuera de eso las experiencias para un solo jugador restantes aportan varias horas, pero nada más a nuestro entretenimiento.

Escrito por Gabriel Llarena Ruiz
Código de Review otorgado por Bandai Namco Latinoamérica / We Move PR