Por Gabriel Llarena Ruiz
Mafia The Old Country es uno de los juegos que más esperaba de la temporada. No solamente por ser alguien que ha estado atento a cada uno de sus juegos, también por qué el primer título me pareció una obra maestra que se quedó grabada en mente por atención al detalle. Cada una de las entregas siempre buscó destacarse en términos argumentales y sentirse como parte del siguiente escalón en lo que respecta a los gráficos porque cada Mafia salió en diferentes generaciones.
Después de que Mafia 3 no fuera muy aceptado entre su base de seguidores, la saga volvió al mercado con un remake del primer juego unos años atrás, y en este 2025 contamos finalmente con un nuevo capítulo de este universo en casi una década. Originalmente todos pensamos que sería una precuela, pero en realidad es un juego independiente que comparte muchas similitudes con el resto de la saga. La pregunta es, ¿vale la pena darle una oportunidad a Mafia? La respuesta es sí. A mí me gustó aunque me veo en la necesidad de mencionar que esta entrega se fue mucho a lo seguro, lo cual es importante remarcar.
LA HISTORIA DE UN MINERO
Aquí controlamos a Enzo Favara, un obrero de las minas de Sicilia que algún día sueña con poder salir adelante y escapar a los Estados Unidos para rehacer su vida en la tan hablada tierra de oportunidades. Sin embargo, las circunstancias terminan haciendo que se vuelva una persona no deseada para los que controlan la mina, que a su vez son miembros de unas de las familias mafiosas de Sicilia justamente. Es su escape tras enfrentar a su patrón en la mina, Enzo termina llegando por accidente a terrenos de Torrisi, otro de los capos de la zona que nos salva y ofrece su protección por el simple hecho de que no permitirá que una familia rival haga de la suyas en propiedad ajena.
The Old Country es el juego más parecido al primer Mafia por varias razones. La razón número 1 es que vemos el ascenso del protagonista en el mundo hampa, alguien que hasta hace poco era solamente una persona ordinaria y sin destacar, mostrando otras facetas que ni él se imaginó. Algo similar ocurre en el primer juego donde éramos un simple taxista que por el azar del destino terminó involucrado con una familia de criminales.
Número 2: En algunos términos por la ambientación y trama, ambos juegos se sienten similares porque el Mafia original fue ambientado en plena época de la prohibición tras el colapso de la bolsa a finales de los años de 1920, por lo que las mafias ganaron mucha influencia y poder en las calles. Mientras que en The Old Country, uno siente como estas familias controlan muchas más cosas de lo que pensamos y la propia autoridad no puede combatir los hechos delictivos como desea. Sin embargo, en este juego casi no hay presencia de una policía como sucede en el resto de los juegos pero ya me voy a explayar más con la siguiente razón.
La razón número 3, y más importante quizás, es que el estructuralmente el título no busca ser otro juego más de mundo abierto más de turno como sus antecesores más recientes. Quiere darte la idea de que hay un mapa abierto a la exploración. No obstante, hay un enfoque lineal sobre a dónde vamos o qué hacemos. En el primer juego, Mafia presentaba una ciudad que podríamos explorar si era lo que queríamos pero en realidad las misiones nos llevaban de una punta a la otra. Una sensación que se repite a cierta escala en Mafia 2 pero no en Mafia 3 al tener un tratamiento más cercano a un juego de mundo abierto. Acá dejan que la trama te lleve a dónde debe ser y se siente más apegado a lo que Mafia 1 me dio como experiencia. Alternativamente tendremos un modo de exploración para buscar coleccionables o ir a dónde queremos pero se nota que no está pensado para iniciar un tiroteo con el fin de luchar contra la policía como si fuera GTA.
Cada capítulo sirve como una introducción lenta pero cada vez más amplia al mundo a nuestro alrededor. Algo que Hangar 13 supo hacer muy bien es ir variando cada vez más los escenarios al punto de darte una buena sensación de que visitamos locaciones variadas y que hayan sabido cuando dejar que “vivamos el momento”, como cuando tenemos un coche veloz a nuestro cuidado y de golpe tenemos una misión de dar vueltas a un circuito entre una zona de antiguas ruinas. Me da mucho gusto que se haya elegido Sicilia como la locación central porque nos da la sensación de poder visitar pueblos, las costas, campos, subir a las colinas, entrar a las fábricas o pasar cerca de las villas.
Y algo que me encanta mucho es como quieren que el jugador admire muy bien sus alrededores. Muchos paisajes son hermosos, más aún con los atardeceres. Me gustó mucho que la interfaz sea tan minimalista que hasta incluso el GPS intenta sentirse natural señalando el camino por dónde debemos ir con carteles y flechas que parecen parte del camino.
UNA ÉPOCA DE VIOLENCIA Y HONOR
Al ser una época donde las armas de fuego eran “más limitadas” fuera de las fuerzas de la ley o el ejército, The Old Country se las ingenia para introducir a los cuchillos como una de las mecánicas base en los combates. No quiere decir que no habrá tiroteos de forma prolongada pero uno se dará cuenta que en este juego se buscó darle más importancia a otras mecánicas hasta el punto de que las peleas contra jefes finales sean únicamente duelos a muerte con cuchillos como si se tratara de una cuestión de honor. El cómo debemos atacar y defendernos con el cuchillo es lo primero que vamos a aprender en detalle durante el segundo capítulo (aunque en el prólogo ya usaremos uno) más que tener un arma de fuego a nuestro alcance de entrada. No tiene un sistema muy profundo e igualmente está compuesto por todo lo básico para darnos algunas peleas por un cierto periodo de tiempo.
Por su parte, los cuchillos juegan un rol importante si queremos ser sigilosos en buena parte del juego. A diferencia de otros títulos de la saga, los elementos de sigilo ganan más presencia teniendo que noquear enemigos, esconder sus cadáveres o apuñalar por detrás. De hecho, muchas de las misiones presentan esta opción para ahorrar munición o complicar las cosas, mientras que existen aquellas que por obligación nos obligan a ser cuidadosos, usar tácticas de distracción y el sistema de cobertura.
Cabe mencionar que el cuchillo se irá desgastando con el paso del tiempo y deberemos afiliarlo con alguna piedra que tengamos en el inventario (o alguna que robemos del cuerpo de algún enemigo tras registrarlo). También podemos atacar a otros enemigos libremente con cuchillos y hasta en ocasiones se suelen defender, haciendo que una pequeña secuencia QTE aparezca en pantalla para que debamos matarlo. Los cuchillos también servirán para abrir candados o romper algunas cerraduras pero cada acción tiene un desgaste por igual.
ALGUNOS PROBLEMAS
Si bien el sigilo pudo haber estado más pulido, el verdadero problema del juego en realidad recae en la inteligencia artificial y ciertas decisiones de diseño. Por ejemplo, en el acto 5, Enzo tiene la libertad de pasar por una zona llena de enemigos usando nada más que sus propias manos para bajar uno por uno a los enemigos, o bien sacar su revólver y escopeta para disparar a todos. Es un escenario bastante típico en juegos de acción y aventuras. Pero acá es donde me di cuenta más de golpe que la IA es demasiado torpe teniendo que ver cómo más de un enemigo corría en línea recta a mí línea de disparo en vez de usar las coberturas o emplear otra estrategia o, que por el simple hecho de que corrí hasta el siguiente punto control (quiero creer), los enemigos que deje atrás ya no me intentaban matar y podía proseguir con mayor tranquilidad. Es como si hubiera pasado a una zona completamente diferente.
Quizás en futuras actualizaciones puedan arreglar esto pero fue una pena que la IA no me diera un enorme reto. Curiosamente en otros capítulos posteriores, en la ciudad de Palermo, y por el simple hecho de no esconder bien el cuerpo de un gendarme, el resto de sus compañeros se dieron cuenta que había un infiltrado en las instalaciones. No es que haya dejado a simple vista aunque me llamó mucho la atención cómo sucedió eso.
Otro detalle que aveces me molestó mucho fue que las interacciones no aparecen en pantalla a menos que estemos en un punto preciso. Con esto me refiero a situaciones donde tenemos que agarrar alguna caja, interactuar con algún objeto o personaje y a menos que no estemos a una cierta distancia, un lugar exacto, no podemos hacer nada.
UN LEVE SISTEMA DE MEJORAS
The Old Country también tiene un muy, muy ligero sistema de RPG para algunas cosas. Para empezar contamos con los Amuletos, los jugadores podrán encontrar medallones y cuentas para la cadena que llevamos puesta (e incluso me gusta el detalle de que todo el menú de personalización sea como uno de esos rosarios católicos). Los Medallones dan ventajas únicas como la posibilidad de matar enemigos de un solo disparo, acelerar la asfixia a los enemigos, esquivar balas ocasionalmente o mejorar tu rendimiento arriba de un vehículo. En el caso de las Cuentas, estas otorgan una serie de mejoras que van desde munición adicional hasta aumentar la velocidad de acciones típicas en combate.
Mientras tanto, los cuchillos y las armas también contarán con sus propias estadísticas aunque debo ser sincero y decir que no le di mucha importancia. Si puedo mencionar que los cuchillos han tenido un poco más de desarrollo al presentar todo tipo de opciones, cada uno con sus propias mejoras únicas para el combate o exploración.
Todo el sistema depende del uso de Dinari, una moneda dentro del juego que nos servirá también para comprar atuendos, coches o caballos.
IMPRESIONES FINALES
Pese a los defectos que señale, Mafia: The Old Country creo que es el juego que más disfrute de la saga después del primer juego. A Mafia 2 lo considero un buen título pero muy decepcionante a la vez, mientras que Mafia 3 es algo que abandoné porque no me atrapaba.
La historia está bien contada aunque claramente no me sorprendió tanto porque he visto situaciones similares no solo en videojuegos, también en películas o series. En algunos capítulos jugaron mucho con ciertas expectativas para que dieran un giro de 180 grados y eso me gustó mucho. El juego comienza muy lento para mí gusto pero después de los primeros capítulos el ritmo va mejorando tras presentar de forma apropiada a sus personajes y el mundo que nos rodea. Cada uno opinará diferente si es que me entiende.
La duración del juego es “perfecta”, con un estimado de 12 a 15 horas solo para la trama principal para jugar a tu ritmo. Hay pequeños detalles que serán apreciados, ciertos paralelismos que siento que fueron pensados para los fans más dedicados, entre otras cosas. Yo sinceramente recomiendo que lo jueguen en la máxima dificultad de ser posible.
Más allá de los problemas con la IA, el rendimiento del juego es más que correcto pero visualmente no se siente un enorme paso adelante. Hay cinemáticas donde todo se ralentiza, las animaciones en algunos casos se ven un tanto duras y siento que le faltaron algunos escenarios más nocturnos. Visualmente se ve lindo y el diseño del mapa es muy bonito pero no tengo demasiado que destacar. Con respecto a los sonidos, Mafia se destaca por el buen uso de la música, los doblajes y hasta se aprecia que hay un doblaje en siciliano aunque no puedo decir si el tono fue el correcto.
No tengo idea si Mafia seguirá este camino o no pero me gustaría que los próximos juegos busquen tener más está identidad. No tienen porque ser un juego de mundo abierto o un sandbox. Deben ser títulos que sepan cómo llevar su trama y personaje a diversas situaciones.
- Desarrollado por: Hangar13
- Publicado por: 2K Games
- Fecha de lanzamiento original: 8 de agosto de 2025
- Disponible en: Xbox Series, PS5, PC
*Código de review proporcionado por 2K*